Guía Completa de Alimentación para Caballos

de la mano de Faunny Bienestar Animal.

Esta artículo proporciona información detallada sobre los distintos tipos de productos alimenticios disponibles para estos animales. Con un enfoque en el bienestar animal, esta guía aborda de manera exhaustiva los aspectos importantes de la alimentación equina, promoviendo una alimentación balanceada y saludable.
Descubre cómo proporcionar una alimentación adecuada para garantizar el óptimo rendimiento y el mantenimiento de los caballos. En esta Guía Completa de Alimentación para Caballos vamos a dar algunos datos sobre la alimentación para Caballos abordando los diferentes tipos de heno, granos, y suplementos de Faunny, así como la importancia de una dieta equilibrada en estos animales.

1. Componentes de la Dieta Equina

Heno

– Tipos de Heno:

1. Heno de timotea: Alto en fibra y bajo en proteínas, ideal para caballos en mantenimiento y con poca actividad.
2. Alfalfa: Rico en proteínas y calcio, recomendable para caballos jóvenes, gestantes o en entrenamiento intenso. Sin embargo, debe administrarse con moderación para caballos que no necesitan tanta energía.
3. Heno de hierba*: Variedades como el heno de pradera son buenas opciones para caballos que no requieran un alto contenido en proteínas.

– Selección de Heno:

Debe estar libre de moho, polvo y no contener plantas tóxicas.

Inspeccionar la calidad y el olor. El heno fresco y seco es el ideal.

Granos

– Características de Diferentes Granos:

1. Avena: Buena fuente de energía, altamente digestible y generalmente bien tolerada por los caballos.
2. Cebada: Otra opción energética; puede ser útil para caballos en régimen de entrenamiento intenso.
3. Maíz: Alto en energía, pero debe darse con cuidado debido a su bajo contenido en fibra y potenciales problemas digestivos.

– Cuándo y Cómo Incorporar Granos:

Los granos se deben utilizar principalmente para caballos activos (competitivos, en entrenamiento, etc.).

Introducir granos de manera gradual para evitar problemas digestivos.

Suplementos para Caballos

– Vitaminas y Minerales Esenciales:

1. Calcio y fósforo: Esenciales para el desarrollo óseo; la relación entre estos dos minerales es crucial.
2. Vitamina E: Beneficiosa para el sistema inmunológico y la salud muscular.
3. Selenio: Importante para la salud celular; puede ser deficiente en algunos suelos.

-Consideraciones sobre Suplementos:

Siempre consultar con un veterinario antes de agregar suplementos a la dieta.

Los suplementos deben complementar la dieta, no reemplazarla.

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Forraje Verde

– Además del heno, el forraje verde (pasto) es fundamental en la alimentación del caballo. Permitir que los caballos paste puede ayudar a mantener su salud digestiva.

– Es vital asegurarse de que el pasto no contenga plantas tóxicas y esté libre de pesticidas.

Agua

– Aunque no es un componente alimenticio en sí mismo, la pureza y disponibilidad de agua son críticas.

– Los caballos deben tener acceso constante a agua fresca y limpia. El agua es esencial en la dieta de los caballos, y un consumo adecuado es crucial para su salud y rendimiento. Este nutriente facilita la digestión, regula la temperatura corporal y ayuda a eliminar desechos. La cantidad de agua que un caballo necesita varía según su actividad física, salud y condiciones ambientales.

– En general, un caballo adulto en reposo debe beber entre 20 y 30 litros de agua al día. Sin embargo, es importante controlar el consumo de agua de tu caballo y ajustar la cantidad según sea necesario. Un caballo de 500 kg puede consumir entre 15 y 25 litros de agua al día, y hasta 50 litros en condiciones de ejercicio intenso o climas calurosos.

Cada caballo es un mundo. Tenemos caballos que no les gusta el heno, o que se aburren con la comida. Hay caballos que engordan con poca cantidad y otros en cambio comen todo el día y no ganan ni un gramo. Por eso, los ajustes pequeños son muy importantes.

Si observa que engorda el caballo con la ración que se le ha recomendado, reduzca ligeramente el pienso, si aun así sigue aumentando de peso, debe cambiar a un pienso con menos calorías y energía y reducir la concentración de aceite en la dieta.

Si pierde peso, aumente, en primer lugar, la ración de forraje. Si esto no funciona o si el caballo no lo come bien, puede dar un pienso más energético y con más calorías o aumentar la ración con una medida de aceite de soja, maíz, girasol o germen de trigo.

Pero asegure siempre que el porcentaje total de pienso que administra no exceda de los valores señalados en la tabla de requisitos de forraje; cada caballo necesita una buena base de forraje para que el intestino funcione correctamente. Cuando le surge una duda, siempre puede acudir a su nutriólogo equino.